Lugar construido en el siglo XIX para ser el puerto fluvial donde se cargaba, en grandes barcos, el mineral extraído de las minas de S. Domingos que se destinaba a Inglaterra, Alemania y otros países. Construido en niveles con edificaciones de tapia de pequeñas dimensiones, el poblado minero, marcado por los colores y elementos de la arquitectura tradicional de Alentejo, es actualmente un pueblo de pescadores. Conserva vestigios del muelle y de las instalaciones mineras, pero actualmente es un puerto pesquero y de ocio, dado su hermoso paisaje en las orillas del Guadiana.