Mértola es abrazada por el arroyo de Oeiras y el río Guadiana, que le aseguran condiciones de defensa envidiable, reforzadas por las imponentes murallas que rodean el casco antiguo. Las calles principales, paralelas al río, que se comunican entre sí a través de estrechos pasajes, se superponen con las antiguas vías de la época romana e islámica. Ser un puerto de conexión con el Mediterráneo le ha asegurado un lugar destacado en la región. Durante la era fenicia, pero también cartaginesa, romana y árabe, fue el eje comercial de la venta de minerales y agricultura en todo el territorio del sur de Alentejo, debido a su ubicación.
El castillo, la torre del reloj, la alcazaba islámica, la iglesia principal, los diversos núcleos museológicos son lugares de visita obligatoria.